Medios

VIDA DE TRASLADOS/
El reposo del hombre móvil

hombre/Por: Adriana Amado - @adrianacatedraa La catástrofe de Once, la tragedia de las rutas, la comedia del último llamado de la tarjeta Sube, el episodio diario de la telenovela de viajar, todo nos recuerda cuánto depende nuestra vida de los traslados. Contrariando los pronósticos del teletrabajo, las nuevas tecnologías no nos dejaron en casa, trabajando en pantuflas. Antes bien, las últimas décadas nos pusieron a rodar, a gastar más tiempo en transportes y en estaciones de trasbordo, a depender más del móvil que de la computadora, que cada vez es más portátil y menos de escritorio.

GASTOS PARA COMUNICAR/
Con cargo para los ciudadanos

Tv/Por: Adriana Amado -@adrianacatedraa. Últimamente se escucha bastante que el problema principal de los funcionarios es la comunicación. La queja florece especialmente en situaciones de crisis, cuando se lamentan de que el problema es que no se comunicó bien (quita de subsidios), se comunicó pero no entendieron (tarjeta Sube); no se comunicó (los muertos que no se producen en el transporte); otros comunican sin permiso (periodistas difundiendo malas noticias). Para estos burócratas comunicantes, el problema nunca está en la gestión, sino en los mensajes que no le hacen justicia. Como si los hechos no hablaran por sí solos, viven empeñados en presentarlos para su comprensión. Con cargo para el contribuyente, claro.

EN LA DISCUSIÓN SOBRE LOS MEDIOS/
Periodistas del noventa

PERIODISTAS DEL 90/Por: Adriana Amado - @adrianacatedraa Parte del relato dice que se empezó a hablar de los medios hace unos pocos años, que apenas ahora se está haciendo una crítica de los periodistas, que todavía le deben una autoevaluación a la sociedad. Para mí, que conozco gente que viene estudiando y discutiendo el tema desde mucho antes de que cambiara el siglo, ese repentismo me parece una injusticia. De hecho, para la época de la crisis de 2001, el periodismo ya había empezado a discutir sobre su condición y había varias iniciativas para ello, como mencioné en alguna otra parte. Poner como punto de partida de la discusión sobre los periodistas a la ley que regula una parte de los medios (los audiovisuales) es desconocer todo el trabajo que se hizo previamente, sin el cual esa sanción no hubiera sido posible. Pero además, creer que la crítica del periodismo es esta que vemos implica aceptar que analizar el periodismo es ridiculizarlo, acusarlo, hacer escarnio de ciertos figurones en programas de baja estofa, replicar consignas seductoras, que no se demuestran por el solo hecho de repetirse como mantras. Ya en 1919 decía Weber que los periodistas eran una suerte de parias juzgados por sus exponentes de menor nivel ético. Un siglo después no podemos discutir el periodismo limitándonos a los pocos nombres que tienen de punta en el programa “678”.

EVENTOS DE COMUNICACIÓN PÚBLICA/
Periodismo y sensación térmica

Cristina x 2/Por: Adriana Amado. Estuve unos días afuera y me perdí el discurso del retorno de la presidente a sus actividades así que lo vi en diferido y fragmentado en la pantalla del móvil. Y ya se sabe, no es lo mismo.  Así que hice lo que aconseja el manual del lector avizor, y a mi vuelta busqué dos análisis del evento en dos medios tipificados como distantes entre sí. Elegí lo que llaman un diario “opositor” frente a un “militante”. Por un lado, la columna del Dr. Eliseo Verón, que  viene analizando estos eventos de comunicación pública en el diario Perfil con una clara posición crítica. Por el otro, un tal Raúl Ludueña, en Tiempo Argentino, que se presenta en las redes como “alguien como vos” pero con el nombre @conorgulloK, para que quede claro qué tanto se nos parece. Las dos me darían una mirada lo suficientemente contrapuesta, pensé, como para buscar un aristotélico punto medio. Pero no. Al final, resultó ser que estaban más de acuerdo de lo que ellos mismos podrían suponer.

EXCESO DE COMUNICACIÓN/
Demasiada información

foto que apareció en cable de la agencia Telam/Por: Adriana Amado. Comunicar no es fácil. Nada fácil. Algunos creen que se trata de informar mucho de cuestiones convenientes, evitar a toda costa las inconvenientes, estimular los halagos, ahogar las críticas, y que con eso el balance de mensajes quedaría del lado positivo. Pero no. La comunicación no es una cuestión de sumas y restas. Es algo complejo, controlable solo en el punto de partida, impredecible en la parte de los mensajeros y sobre todo desbocada en la de los destinatarios, que se han convertido en emisores indómitos por obra y gracia de la tecnología. Basta echar una mirada por las redes para ver cómo toda conversación resulta irremediablemente un teléfono descompuesto. Ya lo decía uno de los sociólogos más influyentes del siglo pasado, el señor Niklas Luhmann: “Comunicar es improbable”. Y pueden enojarse todo lo que quieran con los mensajeros, con los remitentes, con el cartero, con los que abren la carta, con los que, sin abrirla, la tiran a la papelera. El éxito de la comunicación no depende de ninguno de ellos. Pero depende de todos.

OPINAR SOBRE LOS MEDIOS/
Visitadores medi(áti)cos

EN LA TELE/Por: Adriana Amado. Últimamente en la tele se da mucho el especialista en comunicación. Aunque la mayoría no podría acreditar ningún certificado de estudio en el asunto, no tienen ningún empacho en opinar. A esta altura, nadie confundiría un médico con un visitador médico: la prescripción del primero responde al juramento hipocrático y a años de estudios, y la del segundo, al mandato del laboratorio que lo pone en la calle a repetir las propiedades que aprendió de los folletitos de los remedios. Sin embargo, sí se confunde el que sabe con el que sale a opinar sobre los medios, sus efectos nocivos o la monopolización del mercado sin más antecedentes que una fotocopia incompleta de “Para leer el pato Donald”.  Estos últimos vendrían a ser los visitadores médicos de la comunicación: algo así como los APM (Agentes de Propaganda Mediática) que salen por ahí a repetir zonceras. Total, en los programas de la tele en los que se desempeñan, en las entrevistas que les hacen, nadie sabe más que lo que el panfleto les instruyó.

MANDATARIOS LATINOAMERICANOS/
Comunicadores tiempo completo

MANDATARIOS/Por: Adriana Amado. Organiza la agenda en función de las apariciones televisivas. Niega el acceso a los periodistas a las conferencias y demás eventos. No quiere hablar con ellos porque descubrió que puede aparecer en los medios prescindiendo de la prensa. Dice que prefiere hablar a los ciudadanos sin intermediarios (leáse, sin otra mediación que la de las cámaras que propagan cuidadamente sus apariciones públicas). Tiene canales exclusivos en internet para publicar sus novedades y usa las redes sociales para difundir sus actividades, sin mostrar interés en dialogar con sus seguidores. Tiene un eficiente equipo de relaciones públicas  que difunde profesionalmente hasta el mínimo gesto de gobierno.  No, no estoy hablando de ningún mandatario en particular, sino de las características comunes de la comunicación de gobierno de los líderes latinoamericanos. Esa fue una conclusión del  Seminario Comunicación de Gobierno en América Latina, celebrado en Montevideo cuando se conocían los resultados de las últimas elecciones locales, que convocó a investigadores de Uruguay, Chile, Colombia, Ecuador, Perú y Argentina. Los trabajos abarcaron cinco años de comunicación de gobierno  (2005-2010), con lo cual recorrieron Uribe, García, Correa, Bachelet, Kirchner, Fernández de Kirchner, Vázquez, y algo de Santos, Piñera y Mujica. No deja ser llamativo que existan tantas coincidencias de estilo y recursos en personalidades que podrían suponerse diferentes.

SOBRE LOS DATOS DE UNA ENCUESTA/
Periodismo condicionado

ojo periodismo/Por: Adriana Amado. Mucho hablamos de medios. Más hablamos de periodistas. Particularmente estos días en que los hechos de impacto no dan tregua y se prestan para los señalamientos y las críticas impiadosas. Pero ¿cuánto sabemos de medios? ¿Qué datos tenemos de dónde se ven, quiénes los leen? Y más precisamente, ¿qué sabemos de los periodistas? ¿Qué, de cómo trabajan, quiénes los financian, qué recursos tienen para informarnos? Porque últimamente hay mucho análisis de mensajes, pero ¿alguien aporta datos de fondo? ¿Alguien quiere saber algo sobre el periodismo?

CIUDADANÍA, VOTOS Y AGENDA/
Aportando al relato

MEDIOS Y ELECCIONES/Por: Adriana Amado. Ahora dicen que los medios, al fin y al cabo, no tuvieron tanta incidencia en las decisiones de los votantes. Con los resultados de las elecciones en las tapas, unos que opinaron que iba a pasar otra cosa, ahora admiten que pasó lo contrario y que fue la economía estúpido (plasma, planes, plata, depende del analista). Dicen que nada que ver con la comunicación. El mismo día, otros, los obsesionados con los medios hegemónicos, festejaron que al final no resultaron tan destituyentes. Y que era probable que la población se hubiera dado cuenta de que eran unos giles que no entendían nada. Unos y otros decían otra cosa antes de las urnas. Y ahora, con los votos contados, quieren que los escuchemos decir lo contrario.

JUEGO POLÍTICO/
Escándalo, ¡es un escándalo!

 /Por: Adriana Amado. Ya no digo para la campaña electoral de este año, que ya está lanzada. Pero yo sugeriría que para la próxima se les exija a los equipos de campaña que acrediten algunas horas acumuladas en programas de chimentos y/o prensa farandulera. Con un verano pasado al calor de las disputas de las vedetongas de Carlos Paz por lo menos habrían aprendido que los escándalos mediáticos no se ganan nunca. Con mucha suerte, lo único que se puede ganar es tiempo para evacuar la pantalla y evitar que haya menos víctimas en el momento de la explosión. ¡Es un acto suicida intentar desarmar la bomba con todos los votantes adentro de la tele! Eso solo le puede salir bien a Keanu Reeves si los guionistas decidieron que en esa película va  de héroe ocasional. Pero no pasa en la vida real. Menos que menos en campaña.