Confieso que llevará un tiempo. Pero la maldita FOX lo conseguirá.

En breve tiempo, la cadena estadounidense, luego de su victoria lograda bajo el sol gubernamental argentino, logrará que miles de argentinos/as conozcamos mucho sobre Fútbol Americano, Superbowl, NFC y AFC.

Sobre el terreno victorioso, manchado de dólares, la empresa de los negocios deportivos dejará los cuerpos de tanta gente que nunca abonará su paquete Fox Premium, aquel que en la noche del domingo 21 de enero de 2018 impidió una vez más a gran parte de la sociedad argentina ver el superclásico de verano.

A esa misma hora, los argentinos/as no Premium pudieron disfrutar de los touchdowns de Nick Foles y gritar por las Aguilas, o los Eagles, próximos finalistas del Super Bowl al vencer a los Vikingos. 

Si el tema le parece recurrente es que usted aún no sabe lo que se viene. O peor, no sabe todo aquello que ya sucedió en la Argentina.

Anoche, por ejemplo, mientras el River-Boca se jugaba en Mar del Plata y FOX te lo negaba, las pantallas de otro canal, ESPN, mostraba como en los ‘90 imágenes de público boquense y público riverplatenses  saltando en las tribunas.

Es decir, no sólo se burlan del público del cable los bellacos de FOX sino que suman su aporte sus hermanos comerciales de ESPN.

El periodismo deportivo tiene la obligación de dejar constancia de lo ocurrido, al menos cada tanto. El registro histórico del desatino, obviamente silenciado por los periodistas que trabajan en esos medios y por quienes acompañan como comparsa la fiesta de la televisión para pocos, forma parte del rol de periodista que debemos asumir en defensa de la libertad de expresión y el derecho a la comunicación. Antes y ahora.

Y las razones filosóficas y de principios son dos:

  1. Quienes consumen TV por cable abonan un enorme pago mensual para que los canales de TV que incluyen su programación allí le brinden un servicio de “canales deportivos”. Quienes contrataron hace años cualquier proveedor de servicios de cable nunca fueron advertidos de que sería descuartizada la programación deportiva que al argentino/a le interesa, la cual debía y debe incluir los eventos deportivos argentinos más relevantes.
  2. ¿Por qué razón los periodistas deportivos argentinos asumen como natural este desfalco y en cambio pondrían el grito en el cielo si ocurriesen estas dos circunstancias: que los clubes cobrasen derechos de radio para toda emisora que transmitiese partidos o si los partidos de la Argentina en el Mundial se emitiesen sólo por canales Premium de TV Cable con pago extra mensual?

No tenemos dudas de que cualquier defensor del desastre que – amparado por el pensamiento neo liberal del macrismo- intente justificar el hecho que hay que pagar para ver, sucumbiría en cualquier discusión jurídica o social sobre el tema.

Por eso la importancia de la denuncia, y de la constancia permanente en no olvidar cómo les sacan a los pueblos sus derechos.

Mientras tanto, River le ganó a Boca 1 a 0 con gol de Borré. Y usted no lo vio.