El próximo domingo las elecciones presidenciales de Argentina (también se van a desarrollar en Uruguay), serán foco de atención en toda América Latina y el mundo. Será en el final de una semana en la que por las elecciones bolivianas y las protestas en Chile, América del Sur ha captado una mayor atención de la que suele tener. Ayer el analista político Rosendo Fraga dialogó con "La Tarde de CNN"; y en el intercambio se refirió a los reclamos en Chile, y por supuesto a las elecciones del domingo en Argentina.

Argentina a las urnas

De manera puntual sobre las presidenciales locales, dijo que considera poco probable que Macri logre llegar a una segunda vuelta.

Tal como lo explicó, sí parece posible que el actual presidente llegue a los 35 puntos, pero no tanto que Fernández baje de los 45: "y deberían darse ambos resultados juntos", sostuvo.

Más allá de eso también remarcó que en la política nunca hay imposibles y siempre pueden existir los imponderables.

Con relación al mismo escenario remarcó que el segundo debate lo expuso a Macri más armado y seguro que el primero, pero que en general los que apoyan a uno u otro candidato han mirado con buenos ojos a cada cual: "no vuelca sustancialmente los votos un debate", señaló.

Y en tal sentido, aseveró que "las elecciones van a tener bajo nivel de indecisos por la definición previa de las PASO", analizó.

En el final de su análisis, Fraga señaló que si Macri obtiene un tercio de los votos, habrá hecho una muy buena elección: "Que Macri retenga un tercio del electorado, con una situación económica tan mala, es un mérito", concluyó.

Chile de protesta

Al ser consultado sobre las protestas en el vecino país trasandino, que comenzaron por un reclamo ante el aumento del boleto del transporte, pero que luego se extendieron como demanda por otros reclamos sociales y económicos, señaló: "más que un problema de desigualdad social, Chile es el país de América Latina con menor ascenso social", sostuvo.

Y remarcó al respecto que en Chile es muy difícil ascender. Explicó sobre el punto que los poderes son manejados por los blancos adinerados y que incluso los líderes de la izquierda chilena provienen de la clase alta.

Al analizar los motivos de esa cerrada estructura social, el entrevistado señaló que la clave está en la educación: "La educación en Chile es pública pero muy cara", siguió. Y detalló que por ese motivo los grupos más movilizados son los secundarios.

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