COCALERO: MARAVILLOSA Y REVELADORA PELÍCULA |
Evo enamora |
Por: Gustavo Noriega. Esta semana se estrenó Cocalero, un documental que sigue a Evo Morales en la campaña electoral que terminó ungiéndolo presidente de Bolivia. No se trata de cualquier presidente boliviano. Evo es el primer presidente indígena de un país con una población aborigen que representa una enorme mayoría pero que, hasta ese momento, había quedado relegada de los cargos públicos. La experiencia de seguir a Evo es maravillosa y reveladora. La humildad de su medio, de sus amigos y compañeros, de sus parientes, es abrumadora, impresionante. |
Si no fuera porque el espectador conoce el final de esta historia pensaría que se trata de un puñado de ilusos que desconocen las reglas de funcionamiento de las sociedades, esas que dicen que para llegar al poder hay que ser blanco y pertenecer a las capas altas, o por lo menos, medias. Evo recorre el país con su clásico vestuario, que incluye casi indefectiblemente zapatillas y alguna versión de la camiseta boliviana, y se entrevista con los factores de poder: militares, empresarios, la prensa. No siempre sale bien parado (una periodista venenosa lo pone en apuros demasiado fácilmente) pero el encuentro con las Fuerza Armadas termina con una victoria arrolladora. Imaginen un auditorio compuesto por militares bolivianos (no imagino nada más fatuo y con menos derecho a serlo), con sus lustrosos trajes y sus innumerables condecoraciones por batallas nunca libradas. Frente a ellos, Evo, con la versión blanca de la camiseta del Diablo Etcheverry, solo en una tarima. Las preguntas son agresivas, tratan de ponerlo en su lugar. Le preguntan si es consciente de que en el Ejército la disciplina y la verticalidad son condiciones esenciales. Evo dice que sí, que lo sabe pero que los que lo tienen que tener en mente son ellos, ya que si gana y es Presidente, será también Comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas. Un momento delicioso.
La película es irresistiblemente simpática y los medios la celebraron acorde con eso. La mejor nota de los diarios la escribió Horacio Bernades en Página 12, la de El Amante aun no está disponible en la red (¡cómprenlá!) pero es maravillosa y está escrita por Eduardo Rojas, probablemente uno de los mejores críticos en actividad en nuestro país. Me dio curiosidad saber si Ámbito Financiero, el diario más homogéneo ideológicamente en todas sus secciones, habría sucumbido a sus encantos. Y la respuesta es que sí, con sus cuatro deditos arriba (aunque no estoy seguro de dónde está el meñique, pero lo sumo igual) marca un “Muy Buena” y el texto de Paraná Sendros es coherente con esa calificación. Pero como la mirada política de Ámbito no puede dejar pasar un desafío latinoamericanista tan grande, Paraná pone sus objeciones en el futuro, no en lo que pasa en la película. En el copete ya anuncia: “Las desilusiones quedarán para un próximo documental”. Y el remate de la nota dice: “En resumen: un documental que hoy puede verse con curiosidad y hasta simpatía. Mañana quizá se vea con pena.”
Links:
En Página 12
Opiná sobre esta columna en nuestro libro de visitas