Política

presidenciales 2015

Por Luis Majul. Aunque faltan menos de 600 días para las PASO que desembocarán en las próximas elecciones presidenciales, la campaña extraoficial ya comenzó. Y arrancó con todo. Para empezar, y a pesar de que no puede ser candidata, Cristina Fernández, está jugando muy fuerte. Sus objetivos inmediatos: terminar de la mejor manera; impedir que reabran la causa por enriquecimiento ilícito que la involucra y que cerró en tiempo récord Norberto Oyarbide, #elsrdelosanillos; hacer todo lo posible para que ni este magistrado ni Ricardo Jaime ni el vicepresidente Amado Boudou prendan el ventilador, en el caso de que se sientan arrinconados por la justicia; mantener las variables de la economía más o menos estables y pelear, hasta el último minuto, para evitar que Sergio Massa o Daniel Scioli se transformen en sus sucesores. Sucede que la Presidenta tiene in mente, a partir de 2016, convertirse en la jefa de la oposición ‘de un gobierno de derecha’, con la adhesión incondicional de La Cámpora, Unidos y Organizados, Luis D’ Elía y Milagro Sala. Se imagina con una base de apoyo legislativo de entre 60 y 80 diputados nacionales y unos cuántos senadores, para soñar, más adelante, con un operativo retorno como el de Michelle Bachelet en Chile. Es demasiado pronto para vaticinar si podrá lograrlo.

tragamonedas y Cristobal Lopez

Por Luis Majul (Columna publicada en Diario La Nación) Noticia de último momento: los responsables de Lotería Nacional informaron que van a hacer uso de "la prórroga excepcional de 10 días hábiles" que contempla el reglamento de acceso a la información pública para responder a la duda de cómo controla las máquinas tragamonedas de los casinos de Cristóbal López. Lo comunicaron a la producción del programa de televisión que conduzco, hace muy pocas horas, en un texto oficial que tiene la fecha del lunes 7 de abril. Hace casi un mes que intentamos develar uno de los secretos mejor guardados de las operaciones del juego en la Argentina. Pero ni los responsables de Casino Club ni los de Lotería Nacional nos ayudan a resolver el misterio. Los legisladores que acaban de formular una denuncia penal que cayó en el juzgado de Rodolfo Canicoba Corral y cuya instrucción -si lo cree pertinente- debería impulsar el fiscal Guillermo Marijuan, están convencidos de que tanto las tragamonedas del Hipódromo de Palermo como los de los barcos de Puerto Madero no tienen un control adecuado. Sospechan que Lotería no los vigila ni los audita como corresponde.

cristina en el interior de casa rosada

Por Luis Majul. Los cimientos políticos del proyecto kirchnerista se están desmoronando. Hay datos muy finos y casi imperceptibles que lo demuestran, más allá de lo que se publica en los diarios y lo que se dice en la tele. En el corazón del poder de la Casa de Gobierno, por ejemplo, cayeron como un baldazo de agua helada las primeras respuestas de Ricardo Jaime a las indagatorias de los fiscales y los jueces, vinculadas con la masacre de Once, que dejó sin vida a 51 pasajeros del ferrocarril Sarmiento. El exsecretario de Transporte apuntó para arriba. Lo hizo, incluso, por sobre el ministro de Planificación Julio De Vido. ¿Se está quebrando el pacto de silencio y de lealtad hacia Néstor y por carácter transitivo, hacia Cristina Fernández? Hay, dentro y fuera de la administración, quienes suponen que la Jefa de Estado no termina de despedir al vicepresidente Amado Boudou porque teme que él, como otros, empiece a prender el ventilador. También resultaron desconcertantes las declaraciones del supersecretario de Seguridad Sergio Berni, sobre los linchamientos y el crecimiento de la inseguridad. Berni dijo que no había que echarle la culpa a los medios sino a los delincuentes y a los jueces que interpretan la ley de manera demasiado benigna para los asaltantes y criminales.

zafaronni cristina anibal

Por Luis Majul (Columna publicada en Diario La Nación) Hay que empezar por condenar, de entrada, y sin ninguna ambigüedad, a los linchamientos. Y aceptar, además, como disparador de un debate más amplio, la definición del juez de la Corte Suprema, Raúl Zaffaroni, cuando sostiene que el linchamiento que terminó con la vida de David Moreira, de 18 años, en Rosario, debe ser tipificado como un "homicidio calificado". Hay que volver a repetir que nada justifica el ataque masivo físico a una persona, cualquiera que sea el delito que haya cometido. (Me cuesta entender por qué no funcionan los frenos inhibitorios de las personas que patean la cabeza de un hombre en el piso hasta quitarle la vida.) Pero hay que detenerse en el mismo Zaffaroni, cuando, al defender su postura sobre el proyecto de ley que impulsa cambios en el Código Penal, calificó a Sergio Massa de "vendepatria" y "mentiroso". Los adjetivos que usó no son inocuos. Y, por si hace falta aclararlo, se trata de la agresión verbal de un integrante de la Corte Suprema a un diputado nacional que trabaja para ser presidente.

Cristina y Kicillof

Por Luis Majul. Jorge Luis Borges solía decir que los peronistas no son ni buenos ni malos. “Son incorregibles”, era la definición que le gustaba utilizar. Algo parecido se podría decir de los defensores retóricos del modelo ‘nacional y popular de matriz diversificada’. Ellos, los ultracristinistas, ya superaron la categoría de sinceros o mentirosos, honestos o deshonestos. Son, sencillamente, negadores. Porque niegan la realidad y las estadísticas. Quieren ocultar la devaluación y el ajuste detrás de palabras dulces. Manipulan los números según su conveniencia política. Y le ponen a sus decisiones de derecha, una retórica de izquierda. Después, se juntan en una habitación y se autoconvencen de que están haciendo la revolución.

zannini y máximo

Por Luis Majul (Columna publicada en Diario La Nación) Con pocos días de diferencia, dos operadores ocultos de la presidenta Cristina Fernández decidieron hacer públicas algunas de las cosas que piensan. Se trata de su hijo, Máximo Kirchner, y de su asesor todo terreno, Carlos Zannini. Distanciados por el manejo de los cambios que no prosperaron en Fútbol para Todos, parecen obligados a dar la cara, como si fueran los últimos soldados de Cristina, antes de la entrega del poder. En el caso del secretario legal y técnico de la Presidencia, la salida del clóset político vino con yapa. La semana pasada, lloró en una presentación en la Cámara de Senadores y, en las últimas horas, se presentó ante la militancia para reivindicar el controvertido y polémico discurso que el entonces presidente Néstor Kirchner pronunció el 24 de marzo de 2004, en el predio de la Escuela de Mecánica de la Armada. Como se recordará, ese día, ante la mirada atónita de León Gieco y Joan Manuel Serrat, entre otros, y después del emotivo discurso de Juan Cabandié, Kirchner pidió disculpas, en nombre del Estado, por todo lo que no se había hecho para castigar en tiempo y forma la sistemática violación de los derechos humanos durante la dictadura. Desde aquel escenario improvisado omitió, de manera ostensible, nada más y nada menos que la creación de la Conadep y el impulso que dio el presidente Raúl Alfonsín a los juicios contra las Juntas Militares.

Papa Francisco y Cristina

Por Luis Majul. A la Presidenta Cristina Fernández la atormenta lo mismo que le quitaba el sueño a Néstor Kirchner antes de morir. Es la idea de terminar sus días no abrazada por el reconocimiento de la Historia, sino recorriendo los tribunales de Comodoro Py, como Fernando De la Rúa, o incluso privada, en algún momento, de su libertad, como le sucedió a Carlos Menem. El fantasma del juez Norberto Oyarbide prendiendo el ventilador o la amenaza de su colega Claudio Bonadio de investigar a fondo la poco transparente y equitativa distribución de la pauta oficial y el dinero de Fútbol para Todos encendió, en Ella y su círculo íntimo, todos los radares. Sus escuderos en el Consejo de la Magistratura, el secretario de Justicia Julián Álvarez y el diputado nacional Eduardo Wado de Pedro, leyeron bien la extorsión pública que le hizo al gobierno del juez del anillo de los u$s 250 mil dólares. Porque un juicio político en contra de Oyarbide no solo podría generar la reapertura de la causa por enriquecimiento ilícito de Carlos Liuzzi, segundo de Carlos Zannini, por ahora archivada. También podría provocar la necesidad de volver a revisar el expediente contra el matrimonio Kirchner por enriquecimiento indebido, que el inefable magistrado sobreseyó en tiempo récord.

carrio sanz macri

Por Luis Majul (Columna publicada en Diario La Nación) Qué pasaría si Mauricio Macri, Julio Cobos, Ernesto Sanz, Hermes Binner, Elisa Carrió y Pino Solanas se presentaran a elecciones primarias bajo un mismo lema para, primero, competir entre ellos y, después, disputar la presidencia en 2015 frente al mejor candidato del peronismo. Les iría mucho mejor que si se presentaran separados y tendrían más chances de disputar la segunda vuelta. Se enfrentarían, a suerte y verdad, contra Sergio Massa, Daniel Scioli o, en última instancia, con el candidato mejor posicionado del Frente para la Victoria.

Oyarbide

Por Luis Majul. Si Oyarbide se decide a hablar, el Gobierno temblará. Si el juez acaba por prender el ventilador, incluso la honestidad personal de la Presidenta se pondrá, como nunca, en tela de juicio. Esto es lo que piensan Cristina Fernández de Kirchner, su hijo Máximo, y uno de sus hombres más cercanos, Eduardo Wado de Pedro. Íntimo de la Presidenta, flamante miembro del Consejo de la Magistratura, De Pedro pelea, ahora mismo, a brazo partido, para evitar que el frívolo y escandaloso juez federal sea sometido a juicio político. Porque un juicio político contra Norberto Oyarbide no solo podría voltear a Carlos Zannini, el hombre más poderoso del Gobierno después de Cristina, jefe directo de Carlos Liuzzi, quien llamó al juez para pedirle que detuviera de inmediato un allanamiento contra la financiera de un amigo al que le estaban pidiendo una coima. También podría determinar la reapertura de uno de los hechos de impunidad más graves de los últimos diez años: el sobreseimiento en tiempo récord de Néstor Kirchner y Cristina Fernández, denunciados por enriquecimiento ilícito entre 2007 y 2008, cuando el patrimonio de ambos aumentó 158% en apenas un año.

Papa Francisco

Por Luis Majul (Columna publicada en Diario La Nación) Nadie podría decir que Francisco ya hizo la revolución, pero hasta los más agnósticos deberían reconocer que durante su primer año como papa empezó a transformar la Iglesia, a sus fieles y a millones de no creyentes, incluidos la mismísima presidenta argentina y el gobierno que administra. La primera transformación profunda y tangible fue la de la comunicación. Nunca antes un papa se había presentado ante todo el planeta con un sencillo y coloquial "¡Buona sera!". Las risitas que se oyeron en la Plaza San Pedro rebotaron en todas las ciudades del mundo y sirvieron para aumentar la empatía del nuevo líder de la Iglesia con miles de millones de habitantes. A partir de ese momento, Francisco hizo de su manera de hablar y de escribir una marca inconfundible. Ahora todos sabemos que la sabiduría y el conocimiento también se pueden transmitir con un lenguaje simple y entendible.