NUEVO PRESIDENTE DE ESTADOS UNIDOS |
| Obama no es Dios |
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Por: Luis Majul. La asunción de Barack Obama está despertando una expectativa demasiado grande en los Estados Unidos primero y en el resto del mundo después. Si cierra Guantánamo, presenta un cronograma de retirada de las tropas en Irak, flexibiliza el bloqueo a Cuba y establece una alianza para comprarle energía a Brasil, y así dejar de depender del petróleo de Venezuela y de los países árabes, responderá en buena medida a lo que se espera de su gestión. Pero la pregunta del millón es qué va a hacer con los grandes bancos que hoy siguen quebrados y que son los grandes protagonistas de la inédita crisis financiera. Los que no hablan porque el aire es gratis, como Paul Krugman, sostienen que no es suficiente con darles mucha plata. Dice que el Estado tiene que desplazar a los gerentes corruptos e ineficientes y hacerse cargo de ellos, hasta que se solucione el problema de fondo. Krugman afirma también que Obama no está convencido de eso. Y que una solución a medias lo llevará al fracaso.
Por las dudas, habría que empezar a decir y escribir que Barack Obama no es Dios. Y habría que hacerlo ahora mismo, antes de la primera desilusión.
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