CAMINO AL 28 DE JUNIO
Ultimas noticias sobre la campaña sucia  

En TNPor: Luis Majul. ¿Es capaz el juez federal Federico Faggionato Márquez de enviar a la fuerza pública para obligar a declarar en persona a Francisco De Narváez en la causa por la que se investiga a Mario Segovia, el denominado “Rey de la efedrina”? ¿Deberían los operadores de Néstor Kirchner presionar a fondo para que el magistrado al que tomaron como rehén se decida finalmente a hacerlo? ¿Cuál debería ser en ese caso la conducta del primer candidato de Unión Pro? ¿Cómo reaccionarían los principales dirigentes políticos de la Argentina y los más poderosos medios de comunicación? ¿Qué efectos tendría semejante bomba en las últimas dos semanas de campaña electoral?

Todas estas preguntas están presentes en los comandos de Néstor Kirchner y de De Narváez, cuando todavía faltan dos semanas para que termine la campaña electoral más sucia desde el retorno a la democracia, en diciembre de 1983.

Capaz de todo

La respuesta a la primera pregunta es afirmativa: Faggionato es capaz de cualquier cosa. Incluso de obligar a declarar a De Narváez con el auxilio de la Policía Federal. El juez considera al empresario como parte de una asociación ilícita para traficar efedrina. Bajo esa acusación, le exigió que se presente el pasado miércoles 10 de junio, pero De Narvaéz se excusó, lo recusó, y lo consideró parcial. Faggionato había declarado, textualmente:

-No va a zafar así nomás.

Y el involucrado se tomó de esa afirmación para anticipar que el juez no sería neutral.

La recusación está ahora en manos de la Cámara de San Martín. Pero sus miembros podrían resolver la cuestión después del 28 de junio, cuando la foto que hoy precisa el kirchnerismo ya no impactará en la enrevesada campaña. ¿Qué podría hacer entonces Faggionato?. Pedir a Diputados el desafuero de De Narváez para entonces sí, enviarle la fuerza pública. ¿Y cómo seguiría la película?. Con una cámara baja polarizada, entre los deseos de Kirchner y Faggionato y los que suponen que De Narváez es víctima de una campaña que se embarra más a medida que aparecen encuestas que lo dan como ganador. ¿Le conviene este debate al Frente para la Victoria? Los últimos sondeos indican que no: que las declaraciones del ex presidente pidiendo a su adversario que vaya a declarar hicieron que muchos indecisos se terminaran de inclinar por el peronismo disidente.

¿Esto quiere decir que Faggionato no se dará el gusto de exhibir a su sospechado como si fuera un delincuente que rehuye de la justicia? Está por verse. Dos juristas de renombre coincidieron en asegurar que, en los papeles, el magistrado estaría impedido de tomar semejante decisión sin un pronunciamiento de la mayoría de los diputados a favor del desafuero.  Pero ambos agregaron que en la Argentina todo es posible, y todavía más, en el medio de estas elecciones del diablo.

¿Más mugre?

Si los operadores kirchneristas en el Consejo de la Magistratura o los agentes de la SIDE deberían seguir presionando o no a Faggionato para conseguir la foto tan ansiada, es una pregunta que todavía no tiene una respuesta definitiva. En el entorno del ex presidente hay quienes afirman que no hay que “victimizar más a De Narváez”. “Vamos a perder hasta los votos propios”, piensan funcionarios como Sergio Massa y Juan Carlos Mazzón. En cambio otros, como el diputado nacional Carlos Kunkel, suponen que una cosa es la reacción de los medios “opositores” y otra cosa son los votantes que no leen los diarios todos los días y “quienes no eligirían, de ninguna manera, a un candidato vinculado con el narcotráfico”.

Las mismas dudas, pero desde la postura opuesta, existen entre quienes manejan la campaña del hombre que le podría ganar a Kirchner.

Euforia y duda

La semana que pasó reinó la euforia. No sólo por el impacto de la primera encuesta que lo puso por encima de la lista del Frente para la Victoria, sino también por la foto y la solidaridad del vicepresidente Julio Cobos. Pero los asesores más precavidos empezaron a preguntarse.

-¿No es hora de que Francisco explique con lujo de detalles por qué razón un empleado suyo tenía un celular desde el que se comunicaron con Mario Segovia?.

El debate gira entre quienes piensan que ya lo explicó, y sus afirmaciones fueron suficientes, y entre quienes sostienen que hay que salir ya a desinflar las nuevas acusaciones genéricas de Margarita Stolbizer y Elisa Carrió. Acusaciones que cubren a De Narváez con un manto de sospecha, mientras le piden a su colega que vaya a declarar a tribunales.

-No la entiendo a Carrió- dijo alguien de la mesa chica de Unión Pro.- Primero dice que Francisco es víctima de una campaña sucia y fascista. Se solidariza con él porque recuerda que a Enrique Olivera le pasó lo mismo a pocos días de las legislativas de 2005. ¿Y ahora resulta que se vuelve funcional a quienes motorizan la campaña sucia?, se preguntó.

El primer candidato de Unión Pro por la provincia de Buenos Aires está tranquilo, pero espera un nuevo ataque. Una maniobra de la misma o mayor envergadura que el caso de la efedrina. Desde una nueva denuncia de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) hasta la divulgación de datos falsos sobre sus empresas y miembros de su familia.

La más pobre

No sólo se trata de la campaña más sucia desde el retorno de la democracia. También de la más pobre y la más vacía. Los golpes bajos van primeros en el ranking de la información electoral más consumida. Le sigue, pegadito, Gran Cuñado. E inmediatamente después las encuestas que publican los medios sin aclarar que a unas las paga el gobierno y a otras la oposición.

Ninguno de los candidatos está pensando en el lunes 29, pero sería mejor que lo hicieran. Desde el fantasma de la devaluación hasta el aumento de las tarifas de servicios públicos, las expensas, la medicina prepaga, algunos impuestos y los productos de la canasta básica, hay una agenda real que debe ser abordada.

{moscomment}