Lunes. Primer lunes en la ciudad. Retomo actividades y lecturas justo donde las dejé. Me sorprende esa disciplina. ¿Qué traje de allá? Fotos, video, notas, audios de los cual pacientemente extraeré un libro, o dos, y algunas imágenes, o varias.

Más tarde. El 24 de abril de 1923 en Viena se publica la tesis Das Ich und das Es de Sigmund Freud. Hoy se cumplen, entonces, cien años de su edición

Martes. Leo los diarios de Jules Renard y encuentro marcas mías pero que no recuerdo haber hecho. Asocio mucho de lo que dice ahí –ironías, reflexiones sobre la novela– a mi viaje y a mis dudas como escritor.

Miércoles. Jerry me recomienda The head, una serie nueva, trama simple. En una base antártica encuentran una cabeza. Nada más. Desde luego, ya con esa premisa explosiva se puede imaginar el muy buen primer capítulo, alguna vuelta de tuerca en el guión y un final deslucido. Pero el punto de partida es bueno.

Más tarde. El siglo XX fue el siglo del cine y los fascismos. El siglo XXI, el de la promiscuidad. Henry James y Benito Mussolini eran dobles.

Jueves. Leo y subrayo Metafísica de la pampa, la compilación de artículos de Carlos Astrada. La operación parece ser siempre la misma, reemplazar el pesimismo de Ezequiel Martínez Estrada por optimismo telúrico. Astrada sería un lector optimista de Heidegger. La novedad es total. Un argentino optimista. Un filósofo argentino no fatalista.

Viernes. Dos cosas que en la Antártida son diferentes: la queja y el humor.

Sábado. La queja como género clasicista. No sale de un molde, de parámetros definidos. La queja como un arte de variaciones. Robles me habla de Cuentos de la oficina de Mariani como un libro que escapa del realismo seudo-socialista con el recuerdo de la variación. Das Ich und das Es.

Lunes. Desconcentración casi total. Angustia ligera del artista.

Martes. Despertarme temprano en la base Carlini era fácil, en Buenos Aires, difícil.

Más tarde. ¿Donde estuve? No hay respuesta. Base Carlini, Península Potter, Isla 25 de mayo, caleta Potter, Shetland del Sur. ¿En la Antártida? Sí, pero mejor decir Base Carlini. (Carlini, qué nombre.)

Miércoles. Todo el mundo está cansado y habla de la inflación.

Jueves. Ordeno la biblioteca. Acción terapéutica. Libros viejos y nuevos que me entusiasman. Sensación de estar de vuelta, una buena sensación que no se va. También en la cocina hay dioses.