La respuesta, hace unos días, de un Juan Román Riquelme tibiamente enojado a un cronista de TV de TyC Sports (Gastón Recondo) quizás sea el registro más preciso del ancho mundo de los entrevistados frente al pretendido “poder” de la prensa especializada, que muchas se especializa en no saber nada de nada.

“A ver si entendés” le dijo el ex crack de Boca al insistente Recondo, quien sólo buscaba una frase “zocalera” y agresiva del hoy dirigente. Se trataba de la información sobre Wanchope Avila y su futuro en el club.

Este “a ver si entendés” de Riquelme era necesario. La prensa en general, y la deportiva en particular, adquirió en las últimas épocas un tono de falsa sabelotoda que hoy cuesta encontrar un periodista o una periodista con sabiduría, lectura e información.

Vayamos al rubro deportes, que en definitiva debe ser nuestro asunto en esta página. Sin dejar pasar una mirada por el periodismo en general, donde esta vieja y mala costumbre crece y crece.

Dos acontecimientos deportivos de la última semana confirman cómo se agranda la distancia entre buena parte de las y los periodistas deportivos y la realidad del deporte.

La Copa América de Futsal y los Juegos Olímpìcos de Invierno en China dejaron en evidencia – una vez más – el desinterés por la especialización, el estudio y los conocimientos sobre las múltiples prácticas deportivas que se dan en nuestro país.

Así como en el ámbito político hay un desinterés muy generalizado de la prensa por saber lo que ocurre en los profundos terrenos de la vida cotidiana en la Argentina, en los espacios deportivos sucede lo mismo: las generaciones de periodistas deportivos van transmitiendo el vicio de creer que para ser periodista deportivo hay que saber mucho de fútbol profesional y punto.

Hace cincuenta años esta situación asomaba como un alerta. Para este siglo la confirmación llegó: los y las periodistas más conocidos por el público son aquellos que “hacen fútbol” en los medios a los gritos y con petulancia. 

La diversidad, el estudio de otras disciplinas, la formación y capacitación de quienes trabajan en la prensa es casi un cero. Entonces, llega el torneo más importante de Futsal en el continente y no hay coberturas previas, casi no hay especialistas, a excepción de los medios de siempre: DeporTV, por ejemplo.

Se disputan los Juegos de Invierno, y en los canales, las radios, las redacciones, se percibe, se nota, se comprende, que todos y todas sanatean a la hora de hablar de esquí alpino, patinaje artístico o salto de esquí. Y mucho más cuando les toca señalar algo sobre China, país del que sólo hablan –una parte de la comunidad periodística- para burlarse.

Por momentos, todo se parece a una estudiantina, de las peores.

Estimado Riquelme, es difícil que un periodista entienda muchas cosas. Para ello hacen falta horas y horas de lectura, aulas, docentes, dedicación y por sobre todo formación política para saber de qué lado de la vida te ponés. Tené paciencia Riquelme, a veces no saben lo que hacen ni lo que dicen.